Hola!
Hoy me gustaría hablarte sobre un aspecto muy importante en nuestro día a día, pero que solemos dejar olvidado en un segundo plano: el descanso.
Se ha comprobado que la falta de sueño afecta directamente a nuestra salud. A nivel psicológico, las consecuencias de no dormir bien son numerosas:
· Disminuye nuestra concentración, por lo que rendimos menos en las actividades del día a día (en el ámbito laboral, en el académico, etc.).
· Disminuye nuestra velocidad de reacción y, en consecuencia, respondemos más tarde a los estímulos (por ejemplo, vemos que se ha puesto el semáforo en rojo, pero tardamos más en apretar el freno).
· Aumenta la probabilidad de sufrir problemas psicológicos tales como depresión, ansiedad, abuso de sustancias, etc.
Para evitar estos efectos nocivos sobre nuestra salud, es importante crear y mantener una buena higiene del sueño, es decir, unos hábitos que favorezcan un descanso de calidad.
¿CÓMO PODEMOS MEJORAR NUESTRA HIGIENE DEL SUEÑO?
1. Crea un entorno agradable. Para poder descansar correctamente es importante que estés a gusto: elige un buen colchón y una buena almohada, elimina toda la luz y el ruido que sea posible, r
egula la temperatura de la habitación para que sea agradable.
2. Establece un horario de sueño. Acostarte y levantarte siempre a la misma hora va a permitir que tu cuerpo ponga en marcha los procesos desencadenadores del sueño y mejorará la calidad de tu descanso.
3. No abuses de las siestas. Para que su efecto sea beneficioso, una siesta debe ser corta (no exceder los 30 minutos) y no hacerse demasiado tarde.
4. Evita consumir estimulantes y/o alcohol antes de dormir. El café, el té y el alcohol interfieren en el sueño y afectan a la calidad del descanso.
5. Realiza ejercicio físico con regularidad. Sin embargo, evita practicarlo justo antes de irte a dormir… ¡puede causar el efecto contrario!
6. Lleva una dieta equilibrada. La calidad y la cantidad de los alimentos que consumimos afectan directamente al bienestar general y, en consecuencia, a nuestro descanso. Evita alimentos pesados, picantes o azucarados justo antes de irte a la cama.
Si últimamente notas que la falta de sueño te está jugando malas pasadas en tu día a día y quieres mejorar tu higiene del sueño, no dudes en ponerte en contacto conmigo. Puedes encontrarme a través de mi página web y de mis redes sociales.
Experimenta el cambio, siente el bienestar.
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